sábado, 19 de mayo de 2012

Un Visitante Inesperado


Luego de que Javier nos contara su historia, a Mary y a mí, ya teníamos el lugar indicado al cual acudir, donde si o si encontraríamos una respuesta. Nos dirigíamos a Cusco…
     Ya estábamos listos para partir. Mary había preparado una maleta llena de alimentos y con algunas cobijas, ya que eso era lo indispensable para poder sobrevivir. Javier, algo recuperado, se tomo cargo de las medidas de seguridad, en pocas palabras de mí. Habían atado mis manos y brazos y me pusieron una gran chompa para que no se notara las cuerdas y no parezca extraño que dos jóvenes viajen con otro que esta amordazado.
     Luego de revisar todo como tres veces, ya estábamos listos, según Mary. Muy caballerosamente Javier abrió la puerta para que Mary, con la maleta en la espalda, pueda salir. Lo que ni Javier y yo se esperaba, era la reacción que tubo Mary al poder ver tras la puerta.
     Mary se había quedado como estatua parada frente a la puerta sin poder creer lo que estaba viendo. A los pocos segundos volvió en sí, rápidamente, con lagrimas en los ojos, corrió a abrazar a la persona que se encontraba parada pasando el umbral. “¡SERGIO…!” grito entusiasmando.
     No me acordaba que el chico que estaba parado frente a la puerta dudando si tocar o no tocar era uno de los chicos que nos dio la espalda hace tiempo y prefirió hacer otra vida fuera de nosotros. Parece que Mary lo dudo un momento pero sus sentimientos fueron más fuertes que olvido todo lo pasado y solo fue a abrazarlo. Javier seguía parado junto a la puerta sin creer lo que veía, los miraba a Mary y Sergio y luego me miraba a mí, él tampoco sabía que pensar.
     Retrasamos el viaje unas horas y dejamos pasar a Sergio para que nos dé una explicación, o mejor dicho para que nos cuente que estuvo haciendo, como había estado y porque había vuelto.
     “Me siento muy apenado por todo lo que paso, lamento haberlos abandonado en un tiempo donde me necesitaban – las lágrimas no le tardaron en aparecer, tal parece que estaba hablando con toda sinceridad – no viví una buena vida esta tiempo que estuve lejos de ustedes, por ahora no les puedo contar lo que pase pero… – se le apago la voz, Mary muy precavida le había servido un vaso con agua para que no se le secara la garganta al hablar – estoy aquí porque… – comenzó a temblar, Javier no parecía muy convencido se encontraba algo serio y solo trataba de escuchar lo que le parecía importante – estoy aquí porque presiento que ustedes van hacer algo para acabar con él – todos nos sorprendimos, a Mary se le cayó el vaso de agua que estaba sosteniendo. Todos, sin excepción, sabíamos a quien se refería pero… ¿cómo él supo eso? – ¿es… es verdad? – insistió, algo ya interesado Javier asintió – enton….”
     Esta conversación fue corta pero muy nociva, Sergio no se fue con mucho relleno y trato de ir directo a lo que quería, aun me quedaba la duda de cómo él sabía, en ese momento Javier corto su conversación y preguntó “¿Cómo estas enterado de esto?” mirándolo fríamente a los ojos esperaba su respuesta “Hace un par de semanas que tengo pesadillas con él – Javier hiso un mohín, a lo que Sergio sin hacerle caso continuó – en una de estas pesadillas aparecieron ustedes, Mary y Javier – fijo su mirada conforme prenunció los nombres – habían sido atacados por él – me señalo con su dedo – creí que era mentira pero el sueño era continuo, los veía sufriendo – Mary y Javier se miraron las caras, Sergio había visto lo que pasó ese día – vine para ver como estaban, pero al ver por la ventana los vi junto a él – volvió a señalarme – como si nada hubiera pasado – el Guardián me esta destrozando los sueños, no deja de torturarme en estos, ya casi no puedo dormir – se le notaba por su piel blanca las grandes ojeras que tenía por las noches desveladas que habría pasado – es por eso que intuí que ustedes tenían un plan o algo parecido…”
     La mirada de Javier había cambiado, Mary no dejaba de verme. Estaba quedando yo como el malo de la película, pero inteligentemente Javier espero un momento a que Sergio vuelva hablar para saber la razón por la que yo los había atacado. Luego de un tiempo Javier me giño el ojo y hablo “Es verdad lo que dices, nos atacó pero el que nos ataco fue el Guardián, que por un error mío esta dentro de él. Justo nos dirigíamos al lugar de su origen, donde estamos en la certeza que de encontraremos una respuesta, y esta nos pueda llevar a su destrucción… – dejo de hablar y espero a ver qué pasaba o si Sergio agregaba algo mas, pero lo único que se pudo ver era el cambio de mirada de Sergio, se había secado las lágrimas y su mirada era de confianza – así que ahora te vuelvo a preguntar… ¿Vienes con nosotros?”.
     “Estaré con ustedes lo que resta de mi vida…”

(Esta historia es ficción, cualquier parecido a la realidad es pura coincidencia)

No hay comentarios:

Publicar un comentario